Hace un par de días en una de estas noches de nostalgia decidí a volver a ver una de las películas que ha marcado la infancia de muchísimas personas, especialmente de esas que hoy rondan los 25-30 años, ya que a mi me pilló formándome en el vientre de mi madre. Hablo de 'The Princess Bride' o 'La Princesa Prometida' en su traducción al español.
La pronunciación y el inconfundible paisaje del Peak District que podéis apreciar en la imagen anterior me sacaron de la cama e hicieron que me conectase a esa gran base de datos para cinéfilos llamada IMDB para comprobar si mi intuición fallaba o no. Como en la mayoría de las ocasiones no falló y resultó que estaba en lo cierto. La película había sido rodada en el Peak District y en los pueblecillos de los alrededores de la ciudad de Sheffield, véase Castleton. Si esta película ya me traía buenos recuerdos de mi infancia no os podéis imaginar la importancia que ha ganado ahora tras pasar 9 meses de mi vida en esa zona del Norte de Inglaterra. A pesar de que hayan pasado 23/24 años desde que se rodó os aseguro que el entorno natural se conserva prácticamente igual.... aunque digo por experiencia propia que el tema 'príncipes' al estilo Cary Elwes -en sus años mozos, claro- está un poco chungo.
En cuanto a la película, os la recomiendo a todos aquellos que no la hayáis visto nunca. Habiendo marchado en busca de fortuna, y después de 5 años de ausencia, Westley retorna a su tierra para casarse con su amada Buttercup, a la que juró amor eterno y verdadero. Para recuperarla, tendrá que enfrentarse a serios obstáculos (Vizzini y sus esbirros), pero, una vez superados éstos, aún quedará lo peor: el príncipe Humperdinck pretende desposar a la desdichada Buttercup, pese a que ésta no le ama, ya que le sigue queriendo a él.
Puede que la película ahora no os marque tanto como lo hubiese hecho en vuestra infancia o adolescencia pero, a pesar de ello, es uno de esos clásicos que considero permanecerán siempre en nuestra memoria y sería bonito enseñar a nuestros hijos. La historia gira entorno al amor... El amor verdadero, la espera, confianza y esperanza depositada en alguien. De esos amores que aunque no se puedan tener no se irán ni desaparecerán de nuestras mentes jamás. Bajo mi punto de vista, el valor y la idea del amor verdadero que nos transmite la película es algo bonito que inculcar en los más pequeños, aunque con el paso del tiempo todas esas idealizaciones del amor vayan lógicamente despareciendo y estrellándose con la cruel y dura realidad del SER Humano.
La pronunciación y el inconfundible paisaje del Peak District que podéis apreciar en la imagen anterior me sacaron de la cama e hicieron que me conectase a esa gran base de datos para cinéfilos llamada IMDB para comprobar si mi intuición fallaba o no. Como en la mayoría de las ocasiones no falló y resultó que estaba en lo cierto. La película había sido rodada en el Peak District y en los pueblecillos de los alrededores de la ciudad de Sheffield, véase Castleton. Si esta película ya me traía buenos recuerdos de mi infancia no os podéis imaginar la importancia que ha ganado ahora tras pasar 9 meses de mi vida en esa zona del Norte de Inglaterra. A pesar de que hayan pasado 23/24 años desde que se rodó os aseguro que el entorno natural se conserva prácticamente igual.... aunque digo por experiencia propia que el tema 'príncipes' al estilo Cary Elwes -en sus años mozos, claro- está un poco chungo.
En cuanto a la película, os la recomiendo a todos aquellos que no la hayáis visto nunca. Habiendo marchado en busca de fortuna, y después de 5 años de ausencia, Westley retorna a su tierra para casarse con su amada Buttercup, a la que juró amor eterno y verdadero. Para recuperarla, tendrá que enfrentarse a serios obstáculos (Vizzini y sus esbirros), pero, una vez superados éstos, aún quedará lo peor: el príncipe Humperdinck pretende desposar a la desdichada Buttercup, pese a que ésta no le ama, ya que le sigue queriendo a él.
Puede que la película ahora no os marque tanto como lo hubiese hecho en vuestra infancia o adolescencia pero, a pesar de ello, es uno de esos clásicos que considero permanecerán siempre en nuestra memoria y sería bonito enseñar a nuestros hijos. La historia gira entorno al amor... El amor verdadero, la espera, confianza y esperanza depositada en alguien. De esos amores que aunque no se puedan tener no se irán ni desaparecerán de nuestras mentes jamás. Bajo mi punto de vista, el valor y la idea del amor verdadero que nos transmite la película es algo bonito que inculcar en los más pequeños, aunque con el paso del tiempo todas esas idealizaciones del amor vayan lógicamente despareciendo y estrellándose con la cruel y dura realidad del SER Humano.
"Since the invention of the kiss, there have been five kisses rated the most passionate, the most pure. This one left them all behind."
Me despido con dos temas de la banda sonora de la película, con mi adoradísimo Mark Knopfler a la guitarra.
Estimado blogger, visité tu blog y está excelente, me encantaría enlazarte en mis sitios webs. Y por mi parte te pediría un enlace hacia mi web y asi beneficiar ambos blogs con mas visitas.
ResponderEliminarEspero tu Respuesta.
Un cordial saludo
anarosamgv@gmail.com