Bonito microrrelato para ir aprendiendo de uno de los grandes: Gabriel García Marquez. He aquí la importancia de saber relatar un hecho en tan pocas y selectas palabras... Todo un arte pigmeo. En muchos casos, como en este, el arrepentimiento aparece cuando lamentablemente ya es demasiado tarde. A ver si me hago un poco más crítica y atenta con el mundo circundante y relato algún hecho o cosa que vea por la calle. El pesimismo y el estrés me desbordan y sólo me salen cosas trágicas o tristes, más si cabe cuando acabo de emocionarme escribiendo unas lineas de un relato que tal vez publique en el Blog dedicado -supuestamente- a tal efecto. Espero que lo disfruten. Es breve pero intenso... y eso me encanta.
A pesar de todo lo malo que a veces nos brinda la vida, qué bello es vivir y disfrutar con las pequeñas cosas..
"...el drama del desencantado que se arrojó a la calle desde el décimo piso, y a medida que caía iba viendo a través de las ventanas la intimidad de sus vecinos, las pequeñas tragedias domésticas, los amores furtivos, los breves instantes de felicidad, cuyas noticias no habían llegado nunca hasta la escalera común, de modo que en el instante de reventarse contra el pavimento de la calle había cambiado por completo su concepción del mundo, y había llegado a la conclusión de que aquella vida que abandonaba para siempre por la puerta falsa valía la pena de ser vivida".
A pesar de todo lo malo que a veces nos brinda la vida, qué bello es vivir y disfrutar con las pequeñas cosas..
Comentarios
Publicar un comentario